TAIZÉ

La carta de Taizé

Compartir lo que tenemos

 
Muchas iniciativas de intercambio están a nuestro alcance...

Michael de Alemania dejó Taizé en Junio, luego de estar como voluntario por un año.

Fue en Junio que me marche de Taizé después de estar un año, como voluntario. De regreso en mi casa, muchas cosas permanecían aun presentes en mi espíritu y me distraían. Pero después de algunos días, descubrí poco a poco el enorme tesoro que llevaba dentro de mi; los recuerdos de la vida en Taizé. Y la vida en Taizé significa la vida común, el encuentro con el otro, el intercambio, el compartir lo que tenemos.

Antes, cuando pensaba en la palabra «compartir» yo la asociaba sobretodo a alguna cosa material. Después de mi experiencia en Taizé, trabajando y viviendo con los demás voluntarios de todas partes del mundo, he descubierto que como esta puede ir mas allá.

Nosotros podemos compartir la alegría y el sufrimiento, nuestro contexto cultural, los recuerdos, las dudas, la confianza y la fe en Dios. Seguido, lo hacemos inconscientemente. Pero esto es aun mas maravilloso cuando nos percatamos y tomamos conciencia de esos momentos tan simples en nuestra vida diaria.

En la vida común, podemos encontrar esos momentos de creación a través del compartir, que pueden ayudarnos a comprender el misterio de la Eucaristía. Solamente, dando y compartiendo podemos crear algo nuevo e inesperado, algo único. Esos momentos pueden transformarnos, creando una comunión profunda con los demás. ¿No es esta, la comunión en el cuerpo de Cristo, dada y compartida? Estos momentos pueden así, ser un reflejo del misterio de la Eucaristía en nuestra vida diaria. Instalados en nuestra memoria son inolvidables, esperando ser compartidos nuevamente.

... moverse para comprender, desde el interior, otras culturas y otras situaciones humanas ...

Amanda (Suecia) ha participado del reciente encuentro de Manila.

Me gusta mucho viajar. Me gusta mucho encontrar personas que quieran compartir algo de sus vidas conmigo, en un pequeño instante. Me gusta ver como viven, constatar hasta que punto sus vidas son tan diferentes a la nuestra y al mismo tiempo tan similares. Poder compartir la vida diaria del otro es un regalo, especialmente cuando salimos de medios de vida diferentes.

He participado en el encuentro de Taizé en Filipinas y curiosamente en este país me he sentido como estando en casa aun mas que en Suecia. En mi escuela de los 1,400 estudiantes que tenemos, solo 25 de nosotros nos declaramos como creyentes, diciendo que hemos tenido fe. En las Filipinas, había signos por doquier indicando «Jesús te ama» y «Tenemos confianza en Dios», fue impresionante ver a u país vivo en la fe.

Lo que he durante mis viajes es un poco parecido al sentimiento que se puede experimentar, pasando una semana en Taizé. Las personas son abiertas, interesadas en lo que tienes a decir y en eso que eres. Se trata de vivir el momento ofrecido. Visitando diferentes países, permaneciendo con un corazón abierto y generoso, te llega a convencer de que cada relación contribuye a construir un mundo mejor, a condición que uno decida dar lo mejor.

… hacer buen uso de la nuevas tecnologías para desarrollar enlaces de apoyo.

Gunna Anna (Lituania) se esfuerza por reconciliar su fe y sus responsabilidades profesionales.

Agradezco a Dios por todo lo que nos dado, por haberme ayudado a hacerme estas preguntas tan difíciles hace ya algún tiempo: ¿Debo continuar a poner en practica los dones que Dios, me ha dado para así alcanzar metas solamente materiales? ¿Debo hacer todo lo posible por volverme millonaria? ¿O mas bien, no podría yo, poner en practica mis dones y mi experiencia para con los medios de comunicación del siglo XXI, para así desarrollar enlaces en mi parroquia y difundir la palabra de Dios mas lejos que nunca antes? ¿En este caso, como vivir sin pasarme el tiempo en una agradable oficina, con reuniones importantes en las tardes?

Después de haber tomado la decisión de cambiar radicalmente mi vida, estoy bien segura que, «teniendo menos, mas tengo para dar» Agradezco a Dios el haberme mostrado donde poder poner a producir los dones que he recibido.

Última actualización: 21 de octubre de 2010