Desde la hoguera, las mujeres del pueblo y las hermanas de las distintas comunidades presentes en Taizé tomaron el fuego pascual y encabezaron la procesión hacia la iglesia de la Reconciliación. A las 8, llamaron tres veces a la puerta de la iglesia y la luz de la Resurrección entró al canto de "Mshiha qam" ("El Mesías está vivo"), anunciando en un susurro "Está vivo".
Y mientras se encendía el cirio pascual, se cantaba "Lumen Christi" ("Luz de Cristo"), a lo que todos respondían "Deo gratias" ("Gracias a Dios") y la luz se extendía por toda la iglesia. Y no sólo la luz, sino también la alegría que surge en nuestros corazones cuando cantamos la Resurrección.
Al final de la celebración, en 20 lenguas diferentes, nuestros labios y nuestros corazones proclamaron:
¡Cristo ha resucitado!
¡Verdaderamente ha resucitado!
Oración del hermano Matthew
Cristo resucitado, como Juan, Pedro y María Magdalena en la mañana de tu Resurrección, te buscamos por todas partes, pero tú siempre vas delante de nosotros. Aunque no sintamos nada de tu presencia, haznos creer en la señal del sepulcro vacío. Que llegue el día en que comprendamos que tú estabas allí y que nos has enviado para llevar la buena noticia de tu amor a toda la creación.
Fotos
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Para ver la celebración